El día lunes 13 de agosto de 2007, con mi esposa decidimos irnos a pasar una semana al municipio de Cárdenas, que queda muy cerca de la ciudad de Villahermosa, son nada más 50 kilómetros. En Cárdenas tenemos unos tíos, primos y amistades que hace tiempo nos estaban invitando a pasar unos días. La cosa es que ese lunes nos fuimos, aprovechando el aventón que nos dieron en auto mis suegros que iban a visitar un doctor precisamente en esa ciudad. Ocurre que unos 10 minutos antes de llegar a Cárdenas, comenzó una lluvia de esas que parece que alguien está tirando el agua con baldes (cubetas)… era impresionante ver caer el agua, además de los truenos y rayos que caían muy cerca (esto se sabe por lo poco separados que cae luz del rayo y el ruido que provoca, era casi inmediato). Llegando a Cárdenas nos fuimos al doctor bajo una tremenda lluvia, de hecho ni siquiera mi esposa, mi hija y yo nos bajamos del auto… esperamos aquí unos 15 minutos mientras atendían a mi suegra para luego irnos a casa de los tíos y primos que nos esperaban con la comida lista. ¿Pero qué pasó? empezando el trayecto hacia la casa de los primos, las calles empezaban a verse demasiado inundadas, de hecho, no se veía el desnivel de la acera (banqueta)… incluso, en una calle, que seguramente estaba un poco más baja que el resto, el agua le llegó casi a los cristales del vehículo en donde íbamos, y por ende, el agua se nos metió al interior por lo que tuvimos que subir los pies para no mojarnos. Calles más adelante era lo mismo, todo inundado, la gente barriendo el agua desde sus viviendas hacia fuera y varios autos estacionados con el agua más o menos hasta la mitad de los cristales… era impresionante, jamás había visto algo parecido en vivo. Mi suegro, que iba al volante, temía por que le entrara agua al motor del auto, así que encontramos una calle que no estaba tan inundada y nos esperamos un poco a ver si bajaba la intensidad de la lluvia y el nivel del agua de la calle para poder seguir camino a donde los tíos, que no estaban más allá de unas 10 cuadras. Esperamos aquí yo creo que una hora, en la cual, el agua jamás bajó de intensidad y la calle cada vez más inundada… a todo esto, las 3 mujeres que iban en el auto necesitaban ir al baño (esto pasa en todo el mundo… ja ja)… Obviamente los cristales no se podían bajar porque se metía la lluvia, así que era algo un tanto claustrofóbico. La cosa que después de una hora seguimos camino, pero ya no hacia donde los primos, sino que de regreso a Villahermosa, ya que la carretera estaba muy cerca (apenas 2 cuadras), además que los primos, por celular nos comentaban que por su casa el agua les llegaba hasta la rodilla y que era casi imposible meterse en auto, con lo cual, la decisión de regresarnos era un hecho. Se veía fácil llegar a la carretera, pero una cuadra antes, resultó que los vecinos habían cerrado la calle porque los autos provocaban oleaje en el agua y se les metía en sus hogares, así que tuvimos que desviarnos y tomar otras calles que tenían un tráfico impresionante… la cosa que tardamos bastante entre esa calle y la carretera que estaba a 2 cuadras… aparte que pasamos a una gasolinera, en donde las mujeres pasaron al baño y de donde no se podía salir, porque había un camión atorado en la salida… aquí estuvimos fácilmente otros 40 minutos. En resumen, pudimos salir a carretera después de muchísimo tiempo y comenzamos el viaje de regreso a Villahermosa. Después de unos 15 minutos de viaje, la lluvia cesó, de hecho, el camino estaba completamente seco, o sea, el asunto fue nada más en Cárdenas. Ya en la noche, vimos en las noticias nacionales un despacho desde esa ciudad específica, de Cárdenas en el estado de Tabasco, en donde dijeron que en 2 horas había caído la cantidad de agua que se esperaba cayera en todo el mes de agosto, y que los sistemas de drenaje habían colapsado provocando un verdadero caos en la ciudad… Ese tipo de noticias siempre las había visto en la televisión, pero jamás me había tocado vivirlo en carne propia… Hasta hoy, el piso del auto sigue húmero… y no es chiste.