Lo que no mata “fortalece”

Hoy es 7 de octubre de 2006, mi 29º cumpleaños, ¡¡qué bárbaro, cómo pasa el tiempo!!.Las personas más cercanas a mi saben cómo me encuentro en este momento; saben, o se imaginan que han sido más de 8 meses de angustia, de dolor, de desesperación, etc., es verdaderamente imposible explicar por todo lo que me ha tocado pasar en este tiempo, en los cuales he sentido en carne propia lo que es la “soledad” y lo que es ser víctima de personas que sinceramente, después de todo el daño, les deseo lo mejor, pero Dios quiera, y en esto quiero ser insistente que “lo que hicieron con mi familia, no lo hagan con nadie más”, porque la verdad es algo que no tiene precedentes, como dicen en México “no tiene madre”.

Han sido momentos complicados, y aquí quiero hablar por mi, sin mencionar todo lo que ha pasado con mi, ella es la más afectada física y psicológicamente por todo esto, ella, heroicamente, sacando fuerzas de flaqueza ha tenido que soportar cosas que jamás en nuestras vidas nos hubiésemos imaginado que viviríamos, incluso por generaciones en mi familia nadie vivió una experiencia similar, y espero, nadie lo vuelva a vivir, ni mis hijos, nietos, bisnietos, etc…

En todo este tiempo, como dije, he palpado la soledad, la desesperación, el llanto, la rabia, la impotencia y la intranquilidad interior de una forma muy intensa cada una de ellas, la falta de respuestas en todo esto que nos estaba ocurriendo… sinceramente, ha sido lo peor que me ha ocurrido en la vida, y lo que más me llena de impotencia, es que NO fue por causas naturales, sino, causado por personas, y peor aún personas muy cercanas, personas de la familia de mi esposa, y más aún doloroso, es que fueron sus propios padres, haciendo de todo esto, la peor de las traiciones, de la falta de amor propio, la estúpida idea de creerse “dueños de la vida de los demás”.

Lamentablemente, las personas cercanas a la familia no saben de todo el daño que han causado, durante años, han herido profundamente los corazones de los más cercanos, de sus propios hijos…ahora, simplemente la situación llegó a un límite tan extremo, tan inesperado que se salió del control de ellos mismos, dándose cuenta que “NO SON DUEÑOS DE LA VIDA DE NADIE”, que no pueden estar siempre pensando que ellos pueden controlar a todos los que lo rodean. Dios quiera hayan aprendido la lección; personalmente, le he pedido mucho a Dios lo eso, por el cambio de ese par de almas que desde muchos años, mucho antes de entrar a esta familia, cambien de manera positiva, y de una vez por todas “dejen tranquilo” al resto de la familia, y dejen de conseguir sus caprichos utilizando las armas más oscuras que se puedan imaginar.

Pero bueno, como dije en el título “lo que no mata, fortalece”, y a pesar de todo este tiempo de angustia y dolor, he tenido la oportunidad de pensar y meditar y lo más importante, la posibilidad de encontrar la respuesta a aquel “¿por qué?” que hace más de 8 meses me asalta.

Desde aproximadamente el mes de agosto, comencé a vivir un cambio en mi interior, en mi modo de ver las cosas.
Bastó con una visita de 3 matrimonios católicos, a los cuales agradezco mucho su tiempo y dedicación a llevar “palabras de aliento” a los que “la están pasando mal”, todo acompañado de lecturas bíblicas en presencia de Dios.Desde esa primera visita, como dije, comencé a experimentar un cambio en mi, la verdad, nunca me imaginé que iba a percibir tan claramente los testimonios y consejos que estas 6 personas me daban.Después de unas 3 o 4 visitas (1 por semana), ya mi modo de ver todo este dolor fue distinto, de otra forma, más fortalecido, entendiendo muchas cosas y principalmente más tranquilo, ya que anteriormente, el coraje, la impotencia no me dejaban vivir a diario, con las ganas obvias incluso de matar a este par de personas que han sido la que más daño me han hecho en toda mi vida.

Mucho me ha servido también, leer el libro “El Evangelio Secreto de la Virgen María”, el cual me ha gustado mucho, más de lo que pensé al empezarlo. Es un libro con un lenguaje, en mi opinión, “moderno” a diferencia de algunos otros libros religiosos, incluso la Biblia, en que son bastante antiguos en sus expresiones, lo que a veces hace complicada su entendimiento inmediato.Este libro de la Virgen me ha entregado muchas enseñanzas que las he ido poniendo en práctica en estos momentos de desesperación, principalmente en mi tranquilidad, en mi interior que está muchísimo más calmado, más sereno que hace unos 5 meses, y por ende, me siento mucho mejor, me siento fortalecido, con una experiencia que, aunque negativa, me servirá de algo en mi vida, en mi madurez, ya que como dije:
LO QUE NO MATA, FORTALECE.